No sé si habéis probado alguna vez los
auténticos “Piononos de Santa Fe” (Granada) Yo tuve la oportunidad de comerlos
hace ya algunos años y bueno… ¡Esos son inimitables! ¡Los mejores sin duda!
Yo hoy he querido hacer un pequeño y
modesto homenaje a aquellos deliciosos Piononos con esta versión casera que
aunque no son iguales me han hecho recordar aquel sabor a crema pastelera y
caramelo.
Son sencillos de hacer y no tienen ninguna
dificultad. Lo que tendréis que tener en cuenta es que es mejor hacerlos de un
día para otro. Lo ideal es hacerlos por la mañana para tomarlos a la tarde o
hacerlos por la tarde para tomarlos al día siguiente.
¡Si no puedes aguantar no te
preocupes! ¡Ponte a ello! ¡Quizá te salgan aún mejor! (jejeje, yo soy también muy
impaciente, lo entendería).
Vamos a hacerlos en tres partes, pero
tranquilos/as porque no tardaremos más de 60 minutos en hacerlo todo.
Bueno, sin más, os paso los
ingredientes:
- 4 huevos.
- 100 g. de azúcar.
- Una cucharada grande de miel.
- 1 ralladura de limón.
- 90 g. de harina de trigo.
- Una pizca de canela.
La Crema
Pastelera:
- 50 g. de maicena.
- 2 huevos.
- Medio litro de leche (2 vasos)
- 125 g. de azúcar.
El Almíbar:
- 100 g. de agua.
- 100 g. de azúcar.
- Un chorrito de Ron (Opcional)
Lo primero
que vamos a preparar será el bizcocho.
¡Antes que
nada pon a pre-calentar el horno a 240 grados! Lo que queremos es que nuestro
bizcocho se haga muy bien por fuera y muy poco por dentro para que esté bien
flexible.
- El primer paso será montar los 4 huevos a punto de nieve. ¡Vamos a meterle mucho aire para que salga bien esponjoso! Lo podemos hacer a mano (con paciencia y fuerza) o a máquina (se montarán más rápido). Mientras montamos los huevos, le añadimos el azúcar y una pizca de sal.
- Cuando las claras tengan una tonalidad blanquecina pasaremos a añadirle la cucharada generosa de miel y la ralladura del limón, ¡Y seguimos batiendo!
- A continuación tamizamos la harina y la incorporamos a la mezcla en dos veces. Siempre mezclando con la ayuda de una espátula y con movimientos envolventes (para que la masa no pierda el aire).
- Por último, engrasamos un papel de horno que hayamos colocado previamente en la bandeja de horno y… ¡Al horno durante tan solo 4 minutos! (¡sii! ¡Sólo 4!) Enseguida veremos cómo se pone oscuro por fuera ¡Eso será señal de que está listo!
- Al sacarlo, deberemos extender en la encimera un trapo de cocina mojado y escurrido previamente. Colocamos encima el bizcocho y lo enrollamos en el papel. Después, volvemos a enrollar el bizcocho en el trapo húmedo y lo dejamos enfriar previamente. (una vez frío, lo metemos a la nevera).
Ahora,
pasaremos a hacer el Almíbar:
- El primer paso es echar el agua, el azúcar y el Ron en un cazo y poner al fuego fuerte. Cuando esté hirviendo lo dejamos unos 5 minutos y lo apartamos. Dejar enfriar y a la nevera.
Y para
terminar, pasamos a realizar la Crema Pastelera:
Hacer la crema pastelera es muy fácil y os aseguro que sale riquísima.
Sólo tenéis que hacer lo siguiente:
- Echamos en un cazo dos vasos de leche y lo ponemos a calentar a fuego medio-fuerte. Por otro lado, en un bol, echamos un huevo por cada vaso de agua (dos en este caso), añadimos el azúcar y mezclamos. Cuando esté mezclado, incorporamos poco a poco la maicena sin dejar de mezclar.
- En este momento la leche estará a punto de hervir. Cogemos el cazo e incorporamos al bol una pequeña cantidad de leche para evitar que los huevos de la mezcla se cocinen con el calor de la leche. Mezclamos. A continuación volvemos a poner el resto de leche en el fuego y añadimos toda la mezcla del bol. Importante no dejar de mover con varillas hasta que la crema espese. En ese momento ya podemos retirar del fuego y dejar enfriar.
¡A montar
nuestros Piononos!
En este
momento, ya nuestros tres elementos están fríos. Es ahora cuando podemos pasar
a montar los Piononos.
- En primer lugar, sacamos del trapo nuestro bizcocho y lo extendemos en la encimera.
- Bañamos con la ayuda de un pincel nuestro bizcocho con el almíbar.
- Extendemos la crema pastelera por todo el bizcocho.
- Enrollamos y partimos en trozos de unos 2-3 dedos.
- Introducimos la crema pastelera sobrante en una manga y la echamos encima de los piononos.
- Echamos bien de azúcar en cada uno de ellos y con la ayuda de un soplete de cocina quemamos el azúcar.
¡Y a disfrutarlos!