En este post os traigo otra buena
idea para vuestra mesa dulce. ¡Tienes una boda y quiere hacer tú mismo un
detalle dulce para tus invitados? ¡No lo dudes! Estas galletas además de ser
parte de tu mesa dulce también será parte del recuerdo ¡Nadie se las querrá
comer de lo bonitas que son! ¡Ya lo veréis!
En este caso, Vanesa, Mª Carmen, Eva
y un servidor las hemos hecho para la mesa dulce de una boda y… ¡Bueno! ¡Volaron!
Esta es la mejor prueba de que no puedes dejar de hacerlas para cualquier
acontecimiento que tengas…
Te paso los ingredientes para hacer
las galletas:
- 200 g. de mantequilla sin sal.
- 195g. de azúcar glass.
- 1 huevo.
- 400 g. de harina de trigo.
- Media cucharadita de sal.
- 1 cucharadita de esencia de vainilla (¡O canela!)
Después para
decorarlas necesitarás:
- Fondant de color negro.
- Glassa Real y colorante negro.
- 1 Bolígrafo blanco “alimentario”.
Ahora, sólo
tienes que seguir esto sencillos pasos y tendrás tus deliciosas galletas para
decorar:
- Lo primero que vamos a hacer es mezclar bien la mantequilla a
temperatura ambiente junto con el azúcar glass hasta que la mezcla esté bien
"pomada" (como una crema blanquecina).
- Una vez que tengamos la mantequilla bien integrada con el
azúcar vamos a echar el huevo y la sal y ¡a amasar bien!
- Ahora vamos a ir incorporando poco a poco la harina hasta que
vayamos obteniendo una masa cada vez más consistente.
- Seguimos amasando. Ahora cambiamos a las varillas de
amasado... porque la masa cada vez será más consistente y nos costará más
amasar... (lo puedes hacer también con las manos ¡Sin problema!)
- Cuando veamos que ya la masa está bastante más consistente,
la echamos en la encimera y seguimos amasando a mano durante unos minutos hasta
obtener una bola de masa.
- Ahora es el momento de dividir la masa en dos e ir amasando
con un rodillo hasta que tengamos un grosor de unos 8 milímetros.
- TRUCO: Una vez que tengamos la masa estirada lo mejor es meterla
un ratito en la nevera antes de cortar las galletas con los cortadores.
¡Y al horno! Recuerda precalentar el horno a 180 grados para
que esté muy calentito cuando metamos las galletas. En 12-15 minutos estarán
listas. El truco está en sacarlas cuando tengan los bordes doraditos.
Al salir, lo mejor es no tocarlas mucho porque se pueden
partir. Aún estarán algo blanditas pero tranquil@ ¡Al enfriarse endurecerán! Yo
las suelo dejar enfriar en una rejilla que apoyo sobre unos vasos boca abajo.
Ahora ya tenemos nuestras galletas ¡Pero no te las comas
todavía! ¡Lo sé, es complicado no lanzarse! pero debes esperar porque es mejor
comérselas cuando están decoradas. ¡Eso es justamente lo que vamos a hacer a
continuación...
Decoración:
La decoración puedes hacerla de dos maneras diferentes:
Con fondant negro:
Esta es quizá la más sencilla. Si no has usado nunca la glasa
o no tienes buen pulso te recomiendo que uses esta versión. El resultado es
¡Fantástico!
Sólo tenemos que ir extendiendo bien el fondant con la ayuda
de un rodillo e ir colocándolas sobre las galletas. ¡El fondant lo pegaremos a
las galletas con un poco de agua y azúcar!
Con glassa Real:
Esta versión también es muy divertida pero requiere quizá de
más paciencia y entretenimiento. La glassa real la compramos así, sólo tenemos
que mezclarla con agua y echarle el colorante negro para poder usarla.
Le aplicamos la glassa con paciencia (y la ayuda de una manga pastelera con una boquilla) en las galletas y dejamos que se
sequen bien para poder escribir sobre ellas. La glassa quedará dura y podremos
escribir encima sin problema.
Después, sólo tendréis que escribir sobre ellas, meterlas en bolsitas y anudarlas con un lazo que os guste. ¡Y ya están listas para ser devoradas! ¡O no...! jajajaja!!